Las botellas de supresión Interceptor®-HRD son una solución aprobada por ATEX y compatible con NFPA para mitigar los efectos de una deflagración por polvo combustible. Estas botellas de supresión son similares en diseño a los extintores de incendios: son cilindros presurizados que contienen un propulsor de alta presión (nitrógeno) para expulsar un supresor (generalmente bicarbonato de sodio) a una velocidad muy rápida. Estas botellas de supresión se instalan en maquinaria industrial que maneja polvo combustible y actúa como protección para este equipo en caso de que ocurra una deflagración por polvo, ya que se activarán y reducirán los efectos a un nivel tolerable.
Una vez activadas, las botellas de supresión desplegarán supresores creando una nube homogénea dentro del volumen protegido en milisegundos. La deflagración del polvo se mitiga luego a través de dos efectos termodinámicos primarios: primero, la rápida velocidad de despliegue hace que el oxígeno se desplace del evento de combustión, lo que priva a la reacción y, en segundo lugar, el supresor actúa como un disipador de calor que absorbe el calor de la reacción, interrumpiendo así el evento sin un desarrollo completo.